Exposición Trabajo Absoluto
de Juan Luis Moraza (del 16 enero hasta el 5 marzo 2016) Galería Espacio
Mínimo, Madrid.
María Bustos Borrego
La galería Espacio Mínimo, desde luego no da lugar a
errores, el espacio consta de tres salas, en cada una de ellas una obra de Juan
Luis Moraza. La primera instalación, Calendario
de fiestas laborales, presenta sobre una pared varios calendarios laborales
marcados con días de fiesta en rojo, y con cada número una frase, curiosamente,
los calendarios empiezan con el 1 de mayo: el día del trabajador, una fiesta a
nivel global que pretende dedicar un día al esfuerzo del trabajador. Juan Luis Moraza le
dedica a este día las siguientes palabras: "El trabajo absoluto es un
trabajo forzado que se reconoce como ocio; y es un ocio forzado que no se
reconoce como trabajo", curiosamente el artista incurre en la
contradicción de mandar descansar a un trabajador el propio día que se le
dedica, como si el resto de los días de labor no tuviera tanto mérito y como si
la única recompensa que este mereciera fuera un día forzado de
"descanso".
Esta idea y esta obra conecta mucho con otra de las
instalaciones presentadas La fiesta como
Oficio, la sensación que me produce este espacio es de trabajo y fiesta, no solo por el título sino
por el planteamiento y la disposición de los objetos: un cuadrado elevado rodeado
con una cinta de seguridad al estilo americano (negro y amarillo) sobre el
techo más cinta de seguridad entrelazadas, cadenas que repiten los colores y
bombillas iluminadas. Podría ser una escena a pie de una obra del metro, pero
la colocación de los elementos y el cuadrado central se asemeja (al modo
obrero) a una fiesta con sus guirnaldas, sus luces y su escenario.
El primer
paso para conseguir un trabajo es la educación. Las gigantescas pizarras
desgastadas del uso y las gigantescas tizas de las obras Erosis y Tizas y Nofondos
son un recuerdo de las aulas primarias, del esfuerzo y del trabajo, de las
palabras que se repiten una y otra vez y son borradas, hasta dejar solo un
rastro incierto. Usar pizarras no deja de ser una alusión al espectador y a la
posible acción que se podría realizar si no fuera por el tamaño de las tizas.
Entre el año 2014-2015 el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía realizó una
exposición temporal de Juan Luis Moraza: "República", en ella, entre
otras obras, el público podía interactuar pintando pizarras dispuestas en la
pared.
La obra de Juan Luis Moraza no deja de ser un discurso conceptual donde el lenguaje formal y las
ideas del artista son parte del mundo que pretende reflejar. Lamentablemente la
muestra es demasiado breve como para entender todas las alusiones estético
políticas que marca el artista como "tónica general" en la mayoría de
sus obras.
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