jueves, 11 de febrero de 2016


HITO STEYERL INTERMINABLE

“Hito Steyerl. Duty- Free Art”, Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.

11 Noviembre 2015- 21 Marzo 2016


Jorge Belloso Miranda




Es premonitora la pieza que abre la muestra de Hito Steyerl, Strike, pues queda sobredicho que no se va a andar la artista con florituras, sino que va al grano. Y queda también evidente qué medio va a emplear para ello, el audiovisual; pues no obstante, se sirve de doce para realizar esta expposición.
Esto supone un riesgo, pues cabe la posibilidad de perder el hilo del discurso que pretende la artista construir. Y a ello contribuye no sólo la cantidad de los mismos, sino también la duración de estos. También se corre el riesgo, en su gran numerosidad, de mantener la concordancia. Así obras como Lovely Andrea o How no to be seen: A fucking didactic educatorial mov file, y Adorno Grey, parecen estar fuera de contexto cuando realizamos un primer recorrido siguiendo el oficial o impuesto, sentido de la visita. Y tampoco cambia mucho al visionarlos al libre albedrío y pretender conectarlos con el resto. De este modo, creo acertado comenzar la visita con Strike y Guardes, pero me parece precipitada la presencia de Liquidity Inc y tardía la de la obra Is the Museum a Battlefield?, la cual creo es el nexo común de toda la muesta y la tesis principal de la misma.

Otro factor fundamental que acompaña a la obra de Steyerl en esta muestra, son los asientos que te acogen para visionarla y que además sirven para “incluirte” dentro. Así me parece que acierta la artista en la búsqueda de la incomodidad -si acaso es eso lo que busca-, situando las obras I Dream a Dream: Politics on the Age of Mass Art Productions y la ya mencionada Is the Museum a Battlefield?, a algo más de la mitad del recorrido, después de siete salas, ofreciendote esos beligerantes sacos de arena, para “disfrutar” de la obra en la “comodidad” de la trinchera. Quede como ambientación también declarada, la de los asientos de avión -In Free Fall-, y los de la La Torre, donde te incluye en esta última, no se sabe muy bien donde, si en tu propia casa, en una tienda de videojuegos, o en la misma torre-mansión de Saddam Hussein. Creo pues, más correcto para mejor comprensión de la muestra, la presencia de I Dream a Dream: Politics on the Age of Mass Art Productions y Is the Museum a Battlefield?, en el lugar que ocupa Liquidity Inc. Puntualizando no obstante, la redundancia y extensión, y por tanto pesadez, de la obra Guardes.
Por otro lado, November sólo tiene sentido en el hincapié que hace en la idea de ficción y realidad, lo verdadero y lo falso, en donde pone como ejemplo el entierro de Bruce Lee, y que en esta problemática que plantea, de lo real y lo ficticio, puede leerse quizá como la confusión que origina la política internacional y la exportación de conflictos bélicos que pillan al ciudadano de a pie, a trapiés, dejándose llevar: “Be water my friend” (Liquidity Inc). Estando de más Lovely Andrea, ración doble de masoquismo sin sentido, como si lo visionado hasta entonces no hubiera sido suficiente.
How not to be seen: A fucking Didactic Educatorial, no encuentra razón de ser, si no es para perderte aún más tras la sala de obra óptica hasta llegar al “grey cube” de Theodor Adorno, Adorno´s Grey, donde ya es imposible concentrarse -colores aparte-, y la única asociación clara que sacas es que nació Adorno justamente 98 años antes de los atentados de las Torres Gemelas. Veo recomendable la muestra de Hito Steyerl si no fuera porque la población o masa turística que aborda hoy los museos, ya no se sorprende de nada, y mucho menos de algo que ven constante y diariamente en la televisión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario