PROBLEMAS DE
OCCIDENTE
Hito Steyerl, Dutty-Free Art,
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
Beatriz Lalanda
A través de una exposición
audiovisual Hito Steyerl hace pensar al visitante sobre diferentes aspectos de
la sociedad y el mundo globalizado en el que vivimos. Realmente es difícil encontrar
el tema que hace de hilo conductor, esto es debido a que se trata de una exposición antológica donde recopila varios de
sus trabajos en los que sí se puede reconocer un carácter activista y de
denuncia. Este carácter que tiene la exposición no resulta panfletario, sino
que a través de cada sala, y cada video, te induce a la reflexión. Las salas
están acondicionadas de tal forma que afecta a la percepción de los videos
proyectados, las proyecciones cuando reflejan
una perspectiva de la cultura occidental están en un entorno cómodo, pero
cuando hablan de temas que traspasan fronteras,
duros o simplemente desconocidos, el propio ambiente de la sala te
produce incomodad. Realmente hay que hacer un esfuerzo por escuchar el
discurso, esta dificultad en oír es como una metáfora de la realidad, en la que
tienes acceso a toda clase de información pero solo te quedas con los discursos
dominantes producidos por los medios, por pura comodidad.
Este ejemplo queda muy claro en
la sala homónima a la exposición, Dutty-Free
Art, donde nos encontramos a Hito Steyerl pronunciando un discurso, exponiendo
temas como la creación de museos, los
Freeport y el mercado del arte en general, en el contexto histórico actual y dentro
de la problemática socio-política y económica. El discurso dividido en capítulos
resulta interesante, abre los ojos sobre el tránsito de arte mundial, la fluidez
de la información y la manipulación de la misma. Pero aun así, teniendo una
información jugosa, es pesada de ver. Se exhibe en un pequeño espacio contiguo
a la nueva pieza, The Tower,
realizada especialmente para esta exposición,
la cual ensombrece la atención de Dutty-Free
Art, con un volumen desorbitado, un espacio acolchado, escenificado como un
videojuego, que induce al bienestar y a la comodidad. Esta tentación se
introduce después de varia salas realmente incomodas, en las que los temas
tratados quitan las ganas de vivir en
este mundo a cualquiera. Es en ese justo momento, cuando aparece como un fuerte
impacto la pieza, The Tower, aunque
esté basada en hechos reales, creada después del atentado del 11 de Septiembre,
introduce grandes contenidos de
violencia, se trata de un videojuego, un producto lúdico que insensibiliza a
los jugadores, los cuales se refugian en él para desconectar, sin notar que es
un arma de doble filo.
Uno de los temas que se repite mucho,
no siempre patente, es la muerte de su amiga Andrea Wolf, Su trágica desaparición
conmocionó mucho a Hito Steyerl lo que se ve reflejado en las proyecciones,
muchos de los videos son expuestos como homenaje siguiendo una línea en la que
se la idealiza.
Reflexionando te das cuenta que
en el discurso museográfico la gran cantidad de videos seguidos te arrastran, dejandote
agotado intelectualmente como para analizar su contenido. Recuerda un poco al
tratamiento que se le da a Alex, el protagonista de La naranja mecánica, para volverle
bueno, en este caso la música clásica se sustituye por elementos culturales muy reconocidos.
Para finalizar volveré con el
tema de Andre Wolf, analizando con la mayor objetividad posible, y evitando
sentir la empatía que trasmite y emociona en las proyecciones, te da cuenta de que
su muerte no fue tan trágica. Andrea Wolf formaba parte de la PKK, un partido
de lucha armada, su muerte era esperada. Lo que realmente te parte el alma es
la culpabilidad que siente el artista al descubrir que fue patrocinada por la
misma empresa que construyó las arma que la mataron.
No hay comentarios:
Publicar un comentario